Blefaroplastia, la operación estética que más se hacen los cirujanos porque «te quita 10 años de golpe»
La cirugía de párpados es la segunda intervención plástica más realizada en nuestro país, con más de 20.000 casos al año Si se le pregunta a un cirujano plástico a qué operación estética se sometería para mejorar su imagen, la gran mayoría contestaría sin ninguna duda que a una blefaroplastia. Esta intervención, que consiste básicamente en extraer la grasa y recortar el exceso de piel para corregir el desprendimiento de los párpados superiores y las bolsas de los inferiores, es una de las más demandadas precisamente por su gran impacto en el rejuvenecimiento del rostro. «Te quita diez años de golpe», resume el doctor Samuel Espías, uno de las mayores especialistas en blefaroplastias del país, con más de 600 intervenciones al año. Aunque el objetivo principal de la mayoría de los pacientes que se someten a esta cirugía es una mejora estética, la operación de párpados también tiene un importante componente funcional. «El descolgamiento de la piel en la zona ocular no solo deriva en un evidente envejecimiento de las facciones de nuestro rostro, sino que a la larga ese párpado caído también puede causar dificultades de visión, sobre todo en los campos laterales, además de incomodidad, pesadez y fatiga. Una sensación parecida a la de tener un peso encima del ojo», precisa el doctor Espias. ¿A partir de qué edad se recomienda la blefaroplastia? El perfil de las personas que se hacen una blefaroplastia, la segunda operación de cirugía estética más realizada en nuestro país, con más de 20.000 intervenciones al año, ha cambiado mucho en los últimos años. «Aunque la gran mayoría de las pacientes siguen siendo mujeres, cada vez hay más hombres que también demandan esta operación», puntualiza el doctor Roberto Fernández, oftalmólogo y especialista en blefaroplastias del Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología de Bilbao (ICQO). ¿A partir de qué edad está indicada esta intervención? «No existe una edad ideal. Antes se realizaba en torno a los 60 años, pero ahora se suele intervenir a partir de los 40 porque los resultados son más naturales. El párpado no está tan caído y el cambio no es tan brusco por así decirlo», coinciden ambos especialistas. Cómo es la cirugía de parpados ¿En qué consiste la cirugía? La blefaroplastia puede ser completa (párpados y bolsas); superior (solo párpados); o inferior (solo bolsas). En cualquier caso, se trata de una intervención ambulatoria. Es decir, el paciente se va a casa el mismo día de la intervención, que únicamente puede ser realizada por cirujanos plásticos, oftalmólogos o maxilofaciales, nunca por médicos estéticos. El doctor Samuel Espias, que opera en Oviedo y Madrid, es partidario de «individualizar cada caso» a la hora de intervenir en la zona de los párpados «porque no todos los pacientes tienen las mismas necesidades estéticas y funcionales. Unas veces hay que quitar piel, otras subir la ceja y otras reponer volumen. Tampoco es lo mismo tener un ojo redondo que uno almendrado…». La operación, que requiere de anestesia local o sedación, dura entre una y tres horas en función del tipo de intervención y de la pericia del cirujano. «En una blefaroplastia completa generalmente se empieza por la zona superior. En la mayoría de las intervenciones, las incisiones se realizan en las líneas naturales de los párpados superiores y justo debajo de las pestañas en los inferiores, aunque en algunos casos pueden extenderse hacia las patas de gallo. A través de estas incisiones, el cirujano separa la piel de la grasa y el músculo subyacente para extirpar el exceso de grasa, piel o músculo. Por último, los cortes se cierran con suturas muy finas», precisan en la Sociedad Española de Cirugía Plástica y Reparadora (SECPRE). Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de ICQO Bilbao (@icqobilbao) No con cualquier cirujano De la blefaroplstia, cuyo precio medio ronda los 3.000 euros la superior y 5.000 la completa, se dice que es la operación estética que ofrece los mejores resultados coste-beneficio porque es una cirugía relativamente ‘sencilla’, con una recuperación muy llevadera y rápida (una semana de baja laboral) y «el rejuvenecimiento del rostro es muy llamativo sin resultar antinatural», corrobora el doctor Roberto Fernández. En cualquier caso, no deja de ser una operación quirúrgica, por lo que no debe banalizarse. «La zona periocular es muy compleja y si no se domina, aparte de unos resultados antiestéticos, el paciente puede sufrir una alteración funcional del párpado: desde no poder cerrar el ojo hasta una retracción del párpado inferior», advierte el doctor Samuel Espias, que aconseja buscar a un especialista con «mucha experiencia» en cirugía de párpados. «Es una intervención que tiene su intríngulis y si sale mal, la factura la paga el ojo», añade el doctor Fernández. Artículo extraído de elcorreo.com